miércoles, abril 14

“Me llamas tu vida, llámame tu alma;
porque el alma es inmortal, y la vida es un día.”
Paul Charles Bouget

Llamo por su nombre
al amor y sus semejantes.
Cada sueño es una proyección
de las palabras deseadas.

Si me miras es una caricia,
si me tocas es amor puro,
si me piensas es cariño,
si me hablas es respeto.

Llamo a las cosas
por su devoción y encanto,
cada palabra nombra
cada nombre marca.

Si me dices mala
seré impertinente.
Si me llamas loca
seré orgullosa.
Si me mientes
seré indiferente.

Llamo a las cosas por su nombre
no puedo decirte alma,
porque alma es muy mía.
No puedo llamarte amor,
porque amor hay uno solo en la vida.
Siquiera puedo nombrarte
porque nombrar es dar existencia
y sólo existe aquello que se deja
nombrar.
Valeria Elías

3 comentarios:

WHO dijo...

Precisa descripción del amor compartido, no suplicante ni sumiso, sino maduro y honesto.
Te felicito por tus letras y la capacidad para enmascarar en poesía las más crudas razones de la vida.
Un beso, Who.

Taller Literario Kapasulino dijo...

Hermoso regalo nos has hecho Valeria. Y nos haces pensar con éstas palabras.

Sandra Figueroa dijo...

Siempre bellas tus letras amiga. Besos, cuidate mucho.