lunes, abril 10



Voy a escribir como nunca lo hice, voy a pensar más de lo que pienso y voy a decir más de lo que digo...

Te fuiste una mañana y no preguntaste dónde, huiste, con la sonrisa en los labios dejando la puerta cerrada...

Ya he olvidado como es tener hambre, frío, sueño, he recordado en cambio, lo que es sentir un abrazo, escuchar un cuento, compartir un vino...

Si hubiera podido pintar el cielo, o tal vez, recortar la flor que pintó Piccaso, si pudiera volver el tiempo atrás.

Espero que hayas encontrado el sol que creías necesitar, que sin esta luna no brillaría.

Y a pesar de todo, estoy segura de lo que no haré, no volveré a caminar los caminos por los que ya anduve, no le robaré al tiempo sus segundos cuando estés cerca, ni guardaré fechas de encuentro.

Sabes que he sufrido y sufriré, te lastimaría nuevamente, pero no, hoy no, no voy hacer nada...

Sólo voy a escribir un intento de algo, un mensaje errático que el tiempo pueda dispersar, ojalá llegue a tus oídos, a tu corazón y que aún estés ahí...

Iré al infierno por estas palabras. Me estoy crucificando cada día más.

Acaso vayas a llorar, quédate en vos, no pienses en mí. Porque si pudiera también huiría, dejándote como lo hice, otro buque a la deriva.

Valeria Elías

1 comentario:

Anónimo dijo...

Eres la tierra prodiga

no hay semilla que no germine en ti

todo en ti fructifica

todo en ti se cumple

en verano siempre la cosecha

es abundante.

magnifica en sabor

en tus labios no hay

amargura

en tus ojos la vida fluye

en tu pecho no existe el frió

en tu silencio se dice todo

no hay tierra como tu

para sembrar mis sueños