Cambia, vertiginosamente, todo cambia,

no pide permiso, no dice porqué.

Cambia y ya no es lo mismo.

Muta su forma, no la substancia, no la esencia.

Algo termina, algo comienza,

es el principio del fin,

el fin de lo que fue el principio de lo que ha de ser.

Pasamos por la vida y tememos al cambio.

Pasamos y nos resistimos.

Pero cambiamos, quien no cambia perece.

De no ser importante el cambio las mariposas no existirían.

El aleteo de una mariposa produce un huracán

Y la nieve trae consigo una reluciente primavera.

Todo es un causa efecto, un costo beneficio,

nada existe siempre igual.

Por eso la luna se parte en millones de formas distintas,

y por eso la forma en que te miré

nunca más volverá a ser igual.

Valeria Elías