Esa necesidad constante
de agua sedienta,
el impulso oceánico de llegar
a playas desiertas.
Esa distancia maldita que revoluciona
la cabeza,
de aquellos que sin piedad y con temor
se arriesgan a la distancia
creyendo tan sólo en el amor...
La búsqueda constante
de soles antes de la primavera
y el encuentro siempre certero
con la luna traicionera.
Esa incesante necesidad
de mirarnos a los ojos
de decirnos las palabras
y de sentir el sabor de la piel
cuando la luz se apaga.
La soberanía de tu sombra que se presenta
cuando el alma llora,
preguntando qué será.
Valeria Elías
6 comentarios:
Vale hermosa!!!!! que lindo que es sentirse así... enamorada!!!! y extrañar a esa persona hasta en las entrañas!
uno siempre busca soles aun en el invierno
despues de todo es la esperanza la ultima en morir no?...
che altos pelos los de el
a jajaja hay yo siempre tirando pavadas jaja
Nada más la imagen lo dice todo,
y al leerlo.. que bello.
Gracias por compartirlo!
Buenas noches. =)
Que bonito, se que me repito en mis palabras pero es la verdad, eres una persona con una preciosa sensibilidad y ternura!
Amiga te dejo un relajante abrazo y un besote.
Beatriz
Hablas de esa trampa dulce que es el amor,
de esa búsqueda hasta llegar a playas, tal vez desérticas,
de esa sed insaciable
o del ansia de un sol nuevo.
Inquietudes…sentimientos…vida.
Un beso.
¿Cuál es el error de entregarse al amor? el amor es algo más que distancias o cercanías físicas, eso no lo no derrota o engrandece. Entiendo que hay ciertos factores necesarios, pero no esenciales. Usted ama a quien ama donde sea.. El amor no tiene límites raciales, geográficos o linguísticos, uno mismo es quien le pone limitaciones.
Me encantó la imagen en perfecta sintonía con los versos.
Un gran saludo, buena tarde.
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